Esta podría decirse que es mi cara desde el miércoles, justamente cuando tuvimos la revisión.
Pero no te asustes, aunque pueda parecerlo no es tristeza el motivo de las lágrimas.
Todo el mundo sabe de sobra que hay muchas formas de llorar como tipos de lágrimas. Está el llanto de dolor, el desgarrador, el impotente, el rabioso, el feliz, el emotivo... Creo que cada sentimiento tiene su cargamento de lágrimas.
Veamos más de cerca
Sí, sin lugar a dudas estas lágrimas son de felicidad. No hay más que echarles un vistazo rápido para darse cuenta.
¡¡¡Mira mira!!!
En el lado derecho está la lágrima que ya viene con los globos, la que tiene ganas de marcha y la que se ha traído un montón de pastelitos para endulzar el jolgorio. Y al otro, cómo no, está la lágrima bailonga, que lo mismo te toca las maracas que te saca una guitarra española y te canta por Camarón. Muy cerca de ésta nos encontramos con la lágrima social, que se pone muy cerca de la música para, al mismo tiempo, llamar a todas las lágrimas a que se unan al fiestorro. ¡NO PODÉIS FALTAR, ESTA FIESTA ES LA BOMBA!
Más abajo están las lágrimas enamoradas, que a lo mejor se acaban de conocer, pero que aprovechan la ocasión para alardear de lo mucho que se quieren o simplemente de que han pillado cacho, (todo puede ser).
Por supuesto están las lágrimas que lo quieren todo perfecto y se afanan en decorar el ambiente festivo con globos y guirnaldas. Todo tiene que estar muy chic.
¡¡Pero espera!! No hay fiesta que se precie sin el aguafiestas. La vemos perfectamente bien aferrada al ojo. Es la lágrima que se resiste a pasárselo bien, porque no se fía del todo y está empeñada en esperar un poco antes de tirar la casa por la ventana.
Pues bien....la revisión del miércoles fue para llorar de felicidad pero sin culpar a la parte recelosa que no acaba de creérselo.
Los resultados del estudio inmunológico del Duende dictaminaron que POR FIN las médulas del Duende (esta parte tengo que explicarla con más calma porque tiene telilla) están trabajando a tope produciendo esos lifocitos B de memoria que antes el Duende era incapaz de producir por sí solo.
Para el que no lo sepa los lifocitos B y B de memoria son una parte súper importante de la defensa de nuestro organismo. Gracias a los lifocitos B de memoria tenemos anticuerpos que nos permiten luchar contra enfermedades que ya conocemos gracias a las vacunas o a que hemos pasado la enfermedad.
Imaginate la felicidad que teníamos Papá y yo cuando leímos las gloriosas palabras del informe: El paciente presenta una adecuada distribución de linfocitos B con presencia de linfocitos B de memoria.
Todavía sigue más, son muchos los datos que se incluyen pero si los pusiera todos no te enterarías de nada porque a ti (a menos que seas un experto) te sonarían a arameo.
Tras esta dosis de adrenalina la super doctora sonrió de medio lado y nos miró muy fijamente......
Chachachaaaaaannnnnnnn (mola eso de crear ambiente).
QUIMERA COMPLETA
...yyyyyyy...
SUSPENDIDA TODA LA MEDICACIÓN
Bueno bueno bueno y bueno, no te pongo nuestras caras en esos momentos porque eran de estudio. Los ojos vidriosos y muy saltones, la boca entreabierta, los agujeros de la nariz abriéndose y cerrándose a voluntad como si quisieran echar a volar y la respiración entre acelerada y entrecortada mientras el palpitar del corazón acompañaba sonoramente aporreando con estrépito desde el interior del pecho.
Pues sí, después de ya casi tres años el Duende no tiene que tomar ningún medicamento (salvo una pastillita de magnesio que eliminarán muy pronto hasta que desaparezcan los efectos de la ciclosporina).
No hay que estar pendiente de cuánto queda en el bote para ir a comprar más, no hay que acordarse de llevar la bolsaca de las medicinas a todos lados por si acaso la salida se alarga más de la cuenta. No hay que preguntar ¿Qué hora es? para saber cuánto falta para la siquiente dosis.
¡SOMOS LIBRES...LIBREEEEESSSSS!
Papá y yo sabemos que la batalla tiene pinta de estar casi ganada pero también tenemos claro que todavía no hay que cantar "Victoria". Por experiencia sabemos que lo que a veces parece ir muy bien, de pronto da un giro brusco y se te atasca en la garganta como un hueso de pollo, haciendo mucho daño.
Queremos ser cautos pero el cuerpo nos pide disfrutar de éste momento, sólo de éste, sin abusar.
¡¡FELICIDAD!!
Y ya cambiando de tema. En el post de la revisión anterior te conté que además de estar en el hospital al Duende le dio tiempo a conocer a Risto Mejide, Alberto Chicote y al Hombre de Negro y como mala malísima que soy te dejé con las ganas de saber el motivo. muhahahaha!!
Pues se acabaron las esperas (jijijijiji....igual que los medicamentos).
EL MIEDO NOS LO UNTAMOS POR LA MAÑANA EN LAS TOSTADAS Y NOS LO COMEMOS.
AQUÍ NADIE ESTÁ TRISTE PORQUE, ¿SABÉIS LO QUE HACEMOS CON LA TRISTEZA? REÍRNOS DE ELLA
¡¡LA GUERRA LA VAMOS A GANAR!!